jueves, julio 20, 2006

JUNIN: El trasfondo bíblico del Código Da Vinci fue abordado por Alvarez Valdez.

JUNIN, Julio 20, (PUNTO CERO-La Verdad) En el marco de la cátedra libre de Pensamiento Cristiano de la Universidad Nacional del Noroeste, se desarrolló anoche la conferencia sobre “El trasfondo bíblico del Código Da Vinci”, dictada por el sacerdote Ariel Alvarez Valdez, licenciado en Teología Bíblica con la distinción Summa cum Laude en la Facultad Franciscana de Jerusalén.El acto, realizado en el Aula Magna, fue abierto por el director de la cátedra, Monseñor Armando Rosido, cura párroco de la Iglesia San Ignacio de Loyola.El disertante se refirió a los errores bíblicos del Código Da Vinci. “Hay muchos y de todo tipo: geográficos, históricos y topográficos. Pero los más graves y terribles son los errores bíblicos, porque son los que afectan la fe de la gente y los que llegaron, de alguna manera, a escandalizar a las personas”, señaló el disertante en diálogo con La Verdad.Alvarez Valdez demostró el trasfondo bíblico que subyace en la novela. Se refirió en su conferencia a la divinidad de Jesús, sobre la cual el autor de la novela, Dan Brown, la presenta como un invento de Constantino en el Siglo IV; sobre el rol de María Magdalena y su figura, los Evangelios apócrifos y la Ultima Cena.“Algunas personas salieron a decir que el Código Da Vinci era un ataque contra la Iglesia. No creo que sea así, sino que existe un interés comercial. Y como todo lo religioso vende y lo que tiene que ver con algún morbo espiritual genera negocios, tanto Dan Brown, como toda una pléyade de escritores detrás de él, se han enrolado en estas filas para vender libros”, sostuvo el sacerdote.También expresó que “se rescata la posibilidad de aprender más de nuestra fe, conocer mejor nuestra religión y descubrir en verdad cuando algunas personas hablan simplemente por ofrecernos un marketing en el supermercado de los libros”. TrayectoriaAlvarez Valdez es doctor en Teología Bíblica por la Universidad Pontificia de Salamanca, donde obtuvo la máxima calificación por su tesis “La Nueva Jerusalén: ¿ciudad celeste o ciudad terrestre?” También ha realizado viajes académicos por Egipto, Jordania, Turquía, Grecia y la Península de Sinaí. En la Argentina es profesor de Sagradas Escrituras en el Seminario Mayor de Santiago del Estero, y de Teología en la Universidad Católica de la misma ciudad.En 1996, fue incorporado en la Asociación Bíblica Italiana y dos años más tarde designado miembro honorario del Instituto de Filosofía del Derecho de la Universidad de Lomas de Zamora. En el 2003 fue afiliado a la Asociación Bíblica Española. Es consultor de la revista Cuestiones Teológicas y Filosóficas de la Universidad Pontificia Bolivariana (Colombia) y desde hace varios años se dedica a la divulgación popular de la investigación científica de la Biblia a través de escritos y conferencias en la Argentina y en el extranjero. (PUNTO CERO-La Verdad).

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