PERGAMINO, Mayo 31, (PUNTO CERO-La Opinión) Durante la tarde de ayer los responsables de estaciones de servicio consultados por el Diario manifestaron que la entrega del diesel se viene desarrollando sin muchos problemas pero existe una gran demanda en el combustible para calefaccionar.
En un contexto de críticas al Gobierno nacional por las políticas energéticas y alertas sobre una posible crisis, hubo nuevas denuncias en diferentes ciudades del país por faltantes de gas-oil pero, en este sentido, en Pergamino la situación en la tarde de ayer era normal. Hasta ahora la escasez se había circunscripto a localidades donde la demanda del campo es fuerte aunque en la región norte de la provincia de Buenos Aires y, de acuerdo a los datos que recabó LA OPINION en la víspera, el despacho del diesel se hacía sin ningún tipo de restricciones. No obstante el tema fue definido como "muy grave" por la Federación de Estaciones de Servicio y los transportistas de carga reclamaron a las petroleras que "regularicen el abastecimiento".
Un serio problema
Desde hace tiempo, el Diario ha venido alertando por una situación que hoy se ve en la Argentina y pareciera haber desbordado las previsiones con problemas específicos en determinadas épocas del año en la provincia. El gas-oil constituye aproximadamente el 20 por ciento del consumo final de energía -sólo superado por el gas natural (31por ciento)-, y aventaja a la electricidad que tiene índices de 16 por ciento. Dentro del consumo del diesel, las casi tres cuartas partes se están afectando al transporte en general, y los porcentajes restantes corresponden al agro que en el Partido pergaminense superan la media provincial.
Es claro, observando los datos de producción de gas-oil en nuestras refinerías y los volúmenes de venta en el mercado, que se había pasado de tener los fuertes excedentes hasta 2004 a una situación de déficit que se fue agravando con los años. Los meses de mayor demanda son coincidentes con aquellos en los cuales hay más actividad y, al ser la producción de gas oil constante a lo largo de la temporada, se venían repitiendo los faltantes estacionales por problemas no sólo de precios, sino también en la entrega ya que hasta ahora se desmienten los aumentos. "Por supuesto que también se debe tener en cuenta la extensión de la frontera agropecuaria: nuestros productores y nuestra producción avanzaron más que las posibilidades de planeamiento de nuestro Estado e, incluso, de las petroleras", le confirmó un empresario de combustible a LA OPINION ayer en horas de la tarde.
La escasez
Durante 2006 se sancionó una nueva ley de emergencia que fija en 800.000 metros cúbicos el máximo a importar y está vigente hasta 2008 pero, si siguen las tendencias actuales, es probable que las necesidades de importación vayan creciendo más allá de las previsiones y se espera que la solución no pase -por poner un caso extremo como el de la carne- a apuntar la menor producción, para paliar la falta de combustible. Aproximadamente siete estaciones de servicios de la ciudad fueron consultadas al respecto y en todos los casos coincidieron en que "las entregas son restringidas y el panorama es realmente complicado si no se toman cartas en el asunto de manera urgente".
En los casos en que la venta es normal, los responsables aseguraron que "no por esto se despachan batanes o muchos litros más allá de que no falte, la idea que tenemos es que los clientes no sientan el inconvenientes que se vive en toda la provincia pero hay que ser cuidadosos con la cantidad de diesel que se otorga", manifestó claramente el encargado de una reconocida firma pergaminense.
Kerosene complicado
En un contexto de críticas al Gobierno nacional por las políticas energéticas y alertas sobre una posible crisis, hubo nuevas denuncias en diferentes ciudades del país por faltantes de gas-oil pero, en este sentido, en Pergamino la situación en la tarde de ayer era normal. Hasta ahora la escasez se había circunscripto a localidades donde la demanda del campo es fuerte aunque en la región norte de la provincia de Buenos Aires y, de acuerdo a los datos que recabó LA OPINION en la víspera, el despacho del diesel se hacía sin ningún tipo de restricciones. No obstante el tema fue definido como "muy grave" por la Federación de Estaciones de Servicio y los transportistas de carga reclamaron a las petroleras que "regularicen el abastecimiento".
Un serio problema
Desde hace tiempo, el Diario ha venido alertando por una situación que hoy se ve en la Argentina y pareciera haber desbordado las previsiones con problemas específicos en determinadas épocas del año en la provincia. El gas-oil constituye aproximadamente el 20 por ciento del consumo final de energía -sólo superado por el gas natural (31por ciento)-, y aventaja a la electricidad que tiene índices de 16 por ciento. Dentro del consumo del diesel, las casi tres cuartas partes se están afectando al transporte en general, y los porcentajes restantes corresponden al agro que en el Partido pergaminense superan la media provincial.
Es claro, observando los datos de producción de gas-oil en nuestras refinerías y los volúmenes de venta en el mercado, que se había pasado de tener los fuertes excedentes hasta 2004 a una situación de déficit que se fue agravando con los años. Los meses de mayor demanda son coincidentes con aquellos en los cuales hay más actividad y, al ser la producción de gas oil constante a lo largo de la temporada, se venían repitiendo los faltantes estacionales por problemas no sólo de precios, sino también en la entrega ya que hasta ahora se desmienten los aumentos. "Por supuesto que también se debe tener en cuenta la extensión de la frontera agropecuaria: nuestros productores y nuestra producción avanzaron más que las posibilidades de planeamiento de nuestro Estado e, incluso, de las petroleras", le confirmó un empresario de combustible a LA OPINION ayer en horas de la tarde.
La escasez
Durante 2006 se sancionó una nueva ley de emergencia que fija en 800.000 metros cúbicos el máximo a importar y está vigente hasta 2008 pero, si siguen las tendencias actuales, es probable que las necesidades de importación vayan creciendo más allá de las previsiones y se espera que la solución no pase -por poner un caso extremo como el de la carne- a apuntar la menor producción, para paliar la falta de combustible. Aproximadamente siete estaciones de servicios de la ciudad fueron consultadas al respecto y en todos los casos coincidieron en que "las entregas son restringidas y el panorama es realmente complicado si no se toman cartas en el asunto de manera urgente".
En los casos en que la venta es normal, los responsables aseguraron que "no por esto se despachan batanes o muchos litros más allá de que no falte, la idea que tenemos es que los clientes no sientan el inconvenientes que se vive en toda la provincia pero hay que ser cuidadosos con la cantidad de diesel que se otorga", manifestó claramente el encargado de una reconocida firma pergaminense.
Kerosene complicado
Uno de los productos más solicitados en las estaciones locales es el kerosene, un combustible que se utiliza para calefaccionar pero el abastecimiento no es completo en los últimos días. "Son pocos los que venden kerosene en la ciudad y cuando le falta a uno inmediatamente la gente se va al otro lugar", sostuvo el propietario de una estación ubicada en la zona sur de Pergamino. Además dijo que "la entrega está restringida y las bajas temperaturas favorecieron la enorme demanda que existe en la población; los camiones vienen con el producto pero no damos a basto en esta semana para entregar a todos los que vienen". (PUNTO CERO-La Opinión).
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