PERGAMINO, Abril 27, (PUNTO CERO-La Opinión) Durante esta semana se desarrollarán los primeros encuentros con los empresarios del sector con el objetivo de planificar acciones nuevas y en conjunto. Todavía no se conocen los horarios que pueden llegar a establecerse porque se debatirán con los actores involucrados. Se hablará también de intensificar los controles.
Nuevamente, el Municipio intentará poner un tope a la nocturnidad pero no lo hará de manera independiente ya que en el transcurso de esta semana se desarrollará una reu-nión con los empresarios del sector para tratar de diagramar la iniciativa de conjunto. “Hay localidades de la provincia de Buenos Aires que han adoptado medidas similares a las que pretendemos colocar y desde hace algunos días venimos informándonos de la forma en que modificaron el trabajo”, aseguró el doctor Gustavo Fernández, secretario de Gobierno de la Municipalidad. “Sabemos que en Mar del Plata, Tres Arroyos y Junín se debatió el tema con resultados positivos”, añadió el funcionario local que está abocado al proyecto junto con el subsecretario de Gobierno, doctor Ignacio Maureso.
Punto de partida
La iniciativa apunta a brindar un marco legislativo a la nocturnidad en Pergamino, aspecto de incumbencia de Inspección General que se encarga de los controles en los boliches de la ciudad. “Contamos con un cuerpo de agentes que inspecciona bares, confiterías y diversos ámbitos nocturnos donde concurren centenares de jóvenes”, manifestó Fernández. “Además se busca reducir el consumo de alcohol en los adolescentes”, señaló el secretario de Gobierno local.
En el proyecto que se estudia para la ciudad aún no existe un horario límite confirmado para los boliches, pero se analiza la posibilidad de llegar a un acuerdo para cerrarlos aproximadamente a las 6:00 de la mañana. “Estamos estudiando las posibilidades existentes y por tal motivo se convocará a los propietarios de lugares de esparcimiento nocturno para trabajar de manera conjunta, como lo venimos haciendo desde hace un tiempo con la coordinación de diferentes acciones que tienen como único objetivo proteger a nuestros jóvenes”, destacó el titular de esta dependencia municipal.
Según pudo conocer el Diario, la idea es generar un proyecto, debatirlo en nuestra ciudad, y luego establecer canales de diálogo con todos los actores involucrados para establecer un cierre. Se requiere de una normativa para lograr eficacia en los controles y brindar mayor seguridad a las personas.
La noche -que se intentó regular en 1996 también con topes horarios- está estrechamente ligada al consumo de alcohol y drogas, además de la creciente violencia juvenil y hasta accidentes de tránsito.
“Se calcula que el 40 por ciento de las muertes adolescentes en accidentes de tránsito tienen que ver directamente con el alcohol”, explicó un informe entregado al Municipio.
El tope horario también es apoyado por la dirección de Inspección Urbana, organismo municipal que se encarga de los controles a bares y boliches, y venta y consumo de alcohol en la ciudad.
Cambiando hábitos
De esta manera se intentarán modificar algunos hábitos. No habrá baile hasta la salida del sol al tiempo que también se alterará una costumbre que está vinculada con los desayunos entre jóvenes o bien recorridas en vehículos por las calles céntricas sin respetar, en su mayoría, las leyes vigentes en materia de tránsito. “Seguiremos adelante con la prohibición de la venta de bebidas alcohólicas a los menores y también respecto de la presencia de éstos en espacios exclusivos para los mayores, cuestión en la cual Inspección hace mucho hincapié”, señalaron desde el Municipio de Pergamino.
Nuevamente, el Municipio intentará poner un tope a la nocturnidad pero no lo hará de manera independiente ya que en el transcurso de esta semana se desarrollará una reu-nión con los empresarios del sector para tratar de diagramar la iniciativa de conjunto. “Hay localidades de la provincia de Buenos Aires que han adoptado medidas similares a las que pretendemos colocar y desde hace algunos días venimos informándonos de la forma en que modificaron el trabajo”, aseguró el doctor Gustavo Fernández, secretario de Gobierno de la Municipalidad. “Sabemos que en Mar del Plata, Tres Arroyos y Junín se debatió el tema con resultados positivos”, añadió el funcionario local que está abocado al proyecto junto con el subsecretario de Gobierno, doctor Ignacio Maureso.
Punto de partida
La iniciativa apunta a brindar un marco legislativo a la nocturnidad en Pergamino, aspecto de incumbencia de Inspección General que se encarga de los controles en los boliches de la ciudad. “Contamos con un cuerpo de agentes que inspecciona bares, confiterías y diversos ámbitos nocturnos donde concurren centenares de jóvenes”, manifestó Fernández. “Además se busca reducir el consumo de alcohol en los adolescentes”, señaló el secretario de Gobierno local.
En el proyecto que se estudia para la ciudad aún no existe un horario límite confirmado para los boliches, pero se analiza la posibilidad de llegar a un acuerdo para cerrarlos aproximadamente a las 6:00 de la mañana. “Estamos estudiando las posibilidades existentes y por tal motivo se convocará a los propietarios de lugares de esparcimiento nocturno para trabajar de manera conjunta, como lo venimos haciendo desde hace un tiempo con la coordinación de diferentes acciones que tienen como único objetivo proteger a nuestros jóvenes”, destacó el titular de esta dependencia municipal.
Según pudo conocer el Diario, la idea es generar un proyecto, debatirlo en nuestra ciudad, y luego establecer canales de diálogo con todos los actores involucrados para establecer un cierre. Se requiere de una normativa para lograr eficacia en los controles y brindar mayor seguridad a las personas.
La noche -que se intentó regular en 1996 también con topes horarios- está estrechamente ligada al consumo de alcohol y drogas, además de la creciente violencia juvenil y hasta accidentes de tránsito.
“Se calcula que el 40 por ciento de las muertes adolescentes en accidentes de tránsito tienen que ver directamente con el alcohol”, explicó un informe entregado al Municipio.
El tope horario también es apoyado por la dirección de Inspección Urbana, organismo municipal que se encarga de los controles a bares y boliches, y venta y consumo de alcohol en la ciudad.
Cambiando hábitos
De esta manera se intentarán modificar algunos hábitos. No habrá baile hasta la salida del sol al tiempo que también se alterará una costumbre que está vinculada con los desayunos entre jóvenes o bien recorridas en vehículos por las calles céntricas sin respetar, en su mayoría, las leyes vigentes en materia de tránsito. “Seguiremos adelante con la prohibición de la venta de bebidas alcohólicas a los menores y también respecto de la presencia de éstos en espacios exclusivos para los mayores, cuestión en la cual Inspección hace mucho hincapié”, señalaron desde el Municipio de Pergamino.
La intención, amén de propender la salud y el bienestar de la población, no es entrometerse en un negocio sino dividirlo en dos mercados: con adolescentes consumidores de gaseosas y con mayores, habilitados para el consumo de tragos de alta graduación. (PUNTO CERO-La Opinión).
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