jueves, julio 10, 2008

Arquitectos mirando hacia el sur del conurbano

BUENOS AIRES, Julio 10, (PUNTO CERO-Fundación Metrópolitana) Especialistas en planificación urbana propusieron diferentes estrategias que, de implementarse, permitirán la recuperación de territorios ubicados sobre la Cuenca de los arroyos San Francisco y Las Piedras.
Lo más importante: podría incluirse a más de 600 mil personas que hoy viven en zonas marginadas de la metrópolis Buenos Aires.
Mil millones de dólares en una década; diez obras centrales. Se trata de una propuesta diseñada por un equipo de arquitectos y urbanistas de la Universidad de Buenos Aires (FADU – UBA) la cual define estrategias territoriales para recuperar áreas ubicadas sobre la cuenca integrada por los arroyos San Francisco y Las Piedras. La Cuenca es la tercera de la metrópolis Buenos Aires (Matanza-Riachuelo y Reconquista son las otras) y recorre la zona sur del Conurbano Bonaerense. El objetivo de la iniciativa: la inclusión urbana de 600 mil personas en una de las regiones metropolitanas más pobres.
La propuesta la llevan a cabo especialistas en políticas territoriales de la UBA. El equipo está integrado por los arquitectos Rodolfo Macera (director), Ignacio Trabucchi, Alejandro Batain y Patricia Mayo, los pasantes Gustavo Vairolatte y Laura Paneiva, más las arquitectas invitadas Laura Fernández y Susana Eguía. Todos ellos están reunidos en el proyecto “Inclusión Urbana”1 que arrancó luego de la crisis de 2001 elaborando diagnósticos sobre las consecuencias del neoliberalismo sobre el trazado urbano y diseñando estrategias que permitieran revertirlas. En una entrevista con Id Metropolitano publicada el mes pasado, el director de la experiencia, Macera, se refería al momento actual en materia de intervenciones públicas: “el desafío está en volver a la Ciudad del período ‘40-’70 o profundizar los procesos de los últimos años”2.
Los expertos trabajaron codo a codo con más 300 organizaciones vecinales de los siete distritos que abarca la Cuenca San Francisco – Las Piedras: Quilmes (Solano y Bernal Oeste), Lanús (Monte Chingolo), Berazategui, Almirante Brown, Florencio Varela y Lomas de Zamora. Se trata de una valiosa experiencia de relación entre academia y participación social, con proposición de políticas públicas.
Con respecto a estas últimas, el proyecto propone alrededor de 10 intervenciones de distinta magnitud y en diferentes materias. Se incluye desde el necesario saneamiento de arroyos, redes de agua potable y cloacas hasta la construcción de “polos educativos”. El listado completo incluye las siguientes:
- Reactivación del ferrocarril Buenos Aires - La Plata;
- Construcción de una nueva autovía sobre la traza del Camino Gral. Belgrano;
- Construcción de un gran parque público – reserva natural en el predio del regimiento de Monte Chingolo;
- Construcción de 6000 viviendas;
- Construcción de 10 polos educativos de jornada completa, de última generación, con instalaciones polideportivas para los tres niveles de educación;
- Construcción de 10 unidades sanitarias modelo con consultorios externos y capacidad de traslado las 24 horas;
- Construcción completa de la red cloacal primaria y secundaria;
- Complementación de la red de agua potable;
- Pavimentación de la totalidad de las calles con forestación y alumbrado;
- Saneamiento ambiental de arroyos y tratamiento de suelos;

El costo total del programa se estima en 1.100 millones dólares en un período de diez años. Permitiría, de cumplirse, la inclusión social de 600 mil personas que hoy viven marginadas en una de las regiones más postergadas y degradadas de la metrópolis Buenos Aires. Las deficiencias abundan en distintas materias: desocupación, pobreza, indigencia, ausencia de infraestructuras básicas, contaminación. Con estrategias integrales como las que plantea la iniciativa podría iniciarse un proceso de recuperación de la Cuenca. La ausencia de ellas puede devenir en la “creación de campos de concentración de pobres” como alertó Macera en la charla con este medio.
Mientras se espera por intervenciones del Estado, los académicos y las organizaciones continúan con la realización de talleres participativos que permitan profundizar los diagnósticos y evaluar las necesidades. El tercero, tuvo lugar el pasado 7 de junio con una concurrencia masiva. Entre las conclusiones, se manifestó la necesidad de “un modelo de gestión que mejore las políticas públicas, informe a los vecinos y evite a los punteros”. Además de “Inclusión Urbana”, participaron: Federación de entidades de bien público de Solano, Federación de Entidades Consejo de Crisis Sector La Paz, Mesa de Gestión Social de Quilmes, COLCIC Comisión de lucha contra las inundaciones y la contaminación, RECOSUR – FOC - Red de organizaciones Sociales de la Zona Sur, SAHDES, Consejo Comunitario de Tierra y Vivienda, Proyecto CREES Universidad Nacional de Quilmes y Fundación AVINA.
Ahora resta que las políticas públicas tomen cuerpo definitivo en el Estado. Como sea, desde el proyecto “Inclusión Urbana” reconocen buena acogida en el Ministerio de Desarrollo Social que conduce Alicia Kirchner; también en algunos distritos implicados, como es el caso de Quilmes, dirigido por Francisco Gutiérrez. Además, mantuvieron reuniones juzgadas como positivas con el Consorcio de Municipios del Conurbano Sur (COMCOSUR): el ente no tiene facultades operativas pero puede servir al momento de edificar los consensos necesarios.
Vale señalar que algunas obras solicitadas integran diferentes planes implementados en la actualidad por el Estado. Sin embargo, sigue ausente una política integral. Una población de más de medio millón de personas aguarda. De fondo, se encuentra el desafío de revertir un proceso urbano de fuerte fragmentación territorial y exclusión social.
1 Ver www.inclusiónurbana.org.ar 2 Ver Id Metropolitano, Junio 08, “El desafío está en volver a la Ciudad del período 40-70, o en profundizar los procesos de los últimos años”, http://www.metropolitana.org.ar/idm/idm_50/idm_50_nota_03.html (PUNTO CERO-Fundación Metrópolitana).

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