jueves, enero 08, 2009

Malvinas Argentinas: En Tortuguitas la Cooperativa marca rumbo

Historia y datos de la entidad.
Promediaba la segunda mitad de la década del ’60. La necesidad de contar con servicio telefónico llevó a un grupo de vecinos y comerciantes de Tortuguitas a iniciar gestiones con la entonces estatal Entel. Los primeros contactos con la empresa fueron desalentadores. No había planes inmediatos ni mediatos de parte de Entel para proveer de servicio telefónico a la zona. Los vecinos no se dejaron vencer y surgió entonces la actitud solidaria como respuesta. El 25 de noviembre de 1967, en un salón cedido por la Parroquia Nuestra Señora de Fátima, se fundó la Cooperativa Telefónica de Tortuguitas. El servicio de telefonía comenzó a brindarse el año 1971, a partir de 100 líneas iniciales que solo permitían la comunicación dentro de la localidad. En 40 años, Tortuguitas fue cambiando.
Hoy es una pujante localidad, donde conviven la tranquilidad de las casas de fin de semana, con una población de 40.000 habitantes, y un parque industrial privilegiado por estar en un punto estratégico de comunicación con el Mercosur. La Cooperativa de Tortuguitas también ha cambiado. De sus 100 líneas iniciales hoy cuenta con más de 20.000 líneas, cubriendo un área de servicio de 34 kilómetros cuadrados, en parte de los distritos de Malvinas Argentinas, Pilar, Escobar y José C. Paz. Además, la Cooperativa brinda servicio de Internet a más de 3.000 abonados.
Y no solo eso, en estos 40 años ha sabido crear obras que son verdadero ejemplo de las normas éticas de la cultura cooperativista: honestidad, responsabilidad social, pluralismo, y participación societaria.
En la Cooperativa de Tortuguitas hay una convicción: impulsar con acciones concretas el progreso de la localidad y del área de influencia en la que brindan servicio. La empresa social se ha convertido en un polo de desarrollo tecnológico en materia de telecomunicaciones e Internet. Además, implementan iniciativas como el Centro de Estudios y acciones culturales y artísticas. Colaboran con innumerables emprendimientos comunitarios y llevan adelante mejoras de infraestructura en la zona, entre ellas, en los últimos tiempos, la instalación de refugios en las paradas de líneas de transporte automotor. Dentro de esta concepción del rol de empresa social, el deporte no está ausente. La Cooperativa ha proyectado un importante polideportivo que cristaliza el anhelo de contar con un espacio integral para la práctica de deportes. La primera etapa de ese proyecto ya está cumplida con la inauguración, a fines de 2006, de un importante gimnasio, único en la zona. Con una superficie de 1700 mts.2; con tribunas fijas para 550 espectadores ubicados en butacas y tribunas móviles para otros 650; con área de canchas aptas para la alta competencia de básquet, voley, handball y fútbol de salón, entre otras disciplinas; con áreas de vestuarios y sanitarios y el más moderno equipamiento. Un emprendimiento ambicioso que fue logrado con recursos propios de la Cooperativa. Las etapas siguientes del polideportivo son un espacio destinado al desarrollo de actividades culturales – que incluye una sala teatral -, y una pileta climatizada.
Conceptos de Miguel de Céspedes.
Arquitecto. Preside la Cooperativa desde el año 1997.
“Estamos muy orgullosos de lo que ha logrado nuestra Cooperativa en estos años de vida. Lo que hoy somos se lo debemos, en gran medida, al gran esfuerzo que hicieron nuestros socios fundadores, que se comprometieron en la formación de una Cooperativa para lograr teléfonos en nuestra zona. Desde su nacimiento, nuestra Cooperativa no ha dejado de crecer, y siempre lo hizo gracias al esfuerzo solidario de sus asociados.
El presente nos encuentra en muy buenas condiciones. En lo que hace a las telecomunicaciones, brindamos un servicio eficiente, a tarifas muy competitivas. Contamos con más de 20.000 líneas de teléfonos instalados en hogares, comercios industrias y clubes de campo. También desarrollamos nuestra propia banda ancha, Yabirú, que crece de manera permanente”.
“Operar telefonía no es tarea fácil en un mercado tan competitivo. La telefonía fija compite con la telefonía móvil en condiciones desiguales. Esas condiciones nos imponen no estancarnos, ser dinámicos. Así lo entendimos en nuestra Cooperativa, por lo cual fijamos una estrategia de crecimiento fuera de nuestra área específica de servicios. Elegimos, en esta primera etapa, la ciudad de José C. Paz. Allí ya contamos con más de 3000 líneas instaladas. Ese crecimiento nos llevó a la inauguración, recientemente, de una sede en dicho lugar, con 400 metros cuadrados cubiertos, distribuidos en dos plantas, donde se puede comprar líneas, pagar las facturas, hacer reclamos, y todos los trámites que se hacen en la sede de Tortuguitas. Entre la edificación, equipamiento y plantel exterior, llevamos hecha una inversión de $3.800.000.
La sede tiene una central telefónica de última generación, vinculada con la central de Tortuguitas a través de enlaces propios de fibra óptica. Con ello pensamos que en breve vamos a estar ampliando las líneas en el lugar en 2.000 mas. Lo importante es que en José C. Paz competimos de manera directa con Telefónica. Somos una opción concreta para los vecinos de dicho lugar. Ofrecemos un servicio eficiente, con tecnología de punta, y le sumamos calidez en la atención personalizada de nuestra gente.
Las cooperativas del sector hemos tenido que luchar en los ’90 dentro del contexto del proceso de desregulación de las telecomunicaciones, en condiciones muy duras, cuando muchos apostaban a la desaparición de nuestras empresas de base solidaria. Y hemos salido adelante con administraciones austeras y eficientes, con tomas de decisiones correctas y con la permanente incorporación de tecnología. Después hemos tenido que enfrentar la crisis económica de fines de 2001, y también hemos logrado mantenernos, sin endeudarnos. Permanentemente estamos haciendo obras que dan trabajo a los argentinos.El desafío del movimiento cooperativo telefónico pasa por varias cuestiones. Fundamentalmente, por telefonía celular y televisión digital. Dos cuestiones en las cuales el movimiento telefónico cooperativo nacional viene siendo perjudicado. Y esas discriminaciones atentan claramente contra el crecimiento de nuestro sector. La telefonía celular es un rubro que ha motorizado el crecimiento de los servicios públicos en los últimos años. Las empresas operadoras de telefonía celular cuentan con subsidios otorgados por el Estado nacional cuando el servicio era incipiente. Esos subsidios se mantienen aun hoy que el mercado se ha fortalecido.
Mientras, las Cooperativas que operamos telefonía fija no solo no contamos con subsidios sino que debemos mantenernos con tarifas congeladas, previas a la devaluación. Ahora, el movimiento cooperativista cuenta con la posibilidad de brindar el servicio de telefonía celular, a partir de la resolución del Estado de otorgar a las federaciones Fecotel y Fecosur las licencias y las frecuencias del espectro radioeléctrico a partir del surgimiento de la empresa Movistar.
Estimamos que en poco tiempo más las cooperativas podremos conformar la cuarta operadora en el país. Se trata de una aspiración que pondrá fin a una situación de desequilibrio. Un desafío y una responsabilidad que el cooperativismo asume, conciente de la obligación de convertirse en una alternativa concreta de telefonía celular en la Argentina.Pero también es importante que las cooperativas telefónicas podamos ofrecer servicio de multimedia, lo que implica sumar televisión digital.
Estamos dispuestos a afrontar estos proyectos. Tenemos la voluntad, la convicción y las herramientas necesarias para hacerlo. Actualmente tenemos la competencia de los operadores de cable, que ya están ofreciendo telefonía, Internet y televisión digital, algo que a nosotros no nos dejan hacer.
Hoy, tal como estamos, sufrimos una situación de competencia asimétrica. Nos van a dar la posibilidad de operar telefonía celular cuando el mercado ya esté saturado, con una enorme cantidad de líneas ya colocadas. Distinto hubiera sido si nos hubiesen dado la posibilidad cuando el mercado recién se estaba formando, nuestra inserción hubiera sido menos complicada. Lo mismo va a pasar con la televisión digital. De todas maneras es primordial que nos permitan ofrecer estos servicios, ya que si no se plantea una difícil situación para el crecimiento de las cooperativas del sector.
En los ’90, cuando llegó Internet a la Argentina, nuestra Cooperativa comenzó a brindar el servicio en nuestra área de influencia, incluso mucho antes que en otras zonas del Conurbano bonaerense. El crecimiento sostenido de la demanda del servicio en toda la sociedad argentina, y en particular en nuestra zona, hizo decidir a cambiar lra estrategia. Fue así que comenzamos a desarrollar, con nuestros recursos financieros y humanos, el proyecto de contar con una Internet propia, sin tener que depender de operadores externos.
Así se creó Yabirú, la banda ancha de la Cooperativa de Tortuguitas, cuya presentación se hizo en el mes de septiembre de 2006. Hoy, transcurridos casi 25 meses de aquel lanzamiento, cada vez más usuarios optan por el nuevo servicio, ya cuenta con unos 3000 usuarios, un número sensiblemente mayor al que teníamos en la etapa anterior.
Pero la Cooperativa de Tortuguitas no es solo telecomunicaciones. Interactuamos de manera permanente con nuestra comunidad, y por eso podemos mostrar con orgullo nuestro Centro de Estudios, que ha permitido, en los años que lleva de existencia, que cientos de personas de la zona se capaciten para enfrentar mejor el futuro. También tenemos una Comisión de Cultura que genera actividades artísticas y culturales importantes en nuestra comunidad, como un Concurso de Manchas en el que año a año participan cerca de 800 chicos, que apunta a darle importancia a la creatividad artística de nuestros chicos.
También se dan talleres culturales, conciertos musicales, cine y teatro, y cobijamos en nuestra sede al Coro Polifónico de nuestra localidad.También hemos hecho un aporte muy grande a nuestra comunidad con el Polideportivo. Era un espacio que hacía falta y que nos venían reclamando nuestros socios. Un espacio que nuclea a los chicos y a las familias, que apunta a mejorar la calidad de vida, donde se combina el deporte con el concepto de la solidaridad.
Otra manera de interactuar en la comunidad es el apoyo que brindamos a los emprendimientos comunitarios. Apoyamos a escuelas, centros de jubilados, a Bomberos, a entidades deportivas y a muchas otras entidades intermedias. También, nuestra Cooperativa ayuda en el equipamiento urbano, con señalización urbana o con refugios en las paradas de colectivos, por citar algunos ejemplos. De esta manera no hacemos más que cumplir cabalmente con la apertura hacia nuestra comunidad que fija uno de los principios de la cooperación.También aprovecho este medio para hacerles llegar el más afectuoso saludos y el deseo de un muy buen 2009 para todos».

1 comentario:

Anónimo dijo...

La creacion del Polideportivo no es un aporte para la comunidad de tortuguitas, sino para aquellos pocos, de "distinguida clase social" que pueden mandar a sus hijos a ese lugar para realizar algun deporte. O tal vez para sus dirigentes que usan este lugar para cumplir sus propios deseos y se olvidan de lo que significa el concepto de cooperativa.