jueves, noviembre 12, 2009

TIGRE. Escándalo en el Gobierno con unos ATN que se le "perdieron" a Massa

TIGRE, Noviembre 12, (PUNTO CERO-La Política OnLine) El intendente de Tigre fracasó en dos convocatorias seguidas a intendentes para respaldar su proyecto a gobernador. Detrás del vacío de sus pares se oculta un escándalo de proporciones: millones de pesos que Néstor Kirchner le encargó distribuir en la campaña entre los jefes comunales y nunca llegaron a destino. Empiezan a entenderse los notables recelos de los intendentes del Conurbano con el más mediático de ellos, el actual jefe comunal del Tigre, Sergio Massa. Es que según comprobó La Política Online, el ex jefe de Gabinete de Cristina Kirchner los defraudó en el único ítem sagrado para estos políticos curtidos: el reparto de dinero.
En el último tramo de la campaña, Néstor Kirchner tuvo un momento de debilidad y desoyendo su profunda desconfianza hacia el ambicioso jefe de Gabinete de su mujer, encargó a Sergio Massa –tercero en la lista de diputados nacionales detrás de él y de Daniel Scioli- una delicada tarea: repartir fondos frescos entre los intendentes del Conurbano, soporte vital para la elección que encaraba.
El mecanismo burocrático elegido para instrumentar la distribución de fondos no fue otro que los denominados Anticipos de Coparticipación Impositiva para atender desequilibrios financieros, un remedo de los viejos ATN, demonizados por su extensiva aplicación durante el menemismo.
Luego de tomarse un tiempo para “estudiar” el tema, Massa presentó a Kirchner una propuesta que consistía, en promedio, en entregar dos cuotas de 9 millones a cada intendente. “Dale, metele”, le contestó el ex presidente, que por esas horas estaba enfrascado en la pelea con Francisco de Narváez.

Estalla el escándalo
Luego ocurrió lo sabido, Kirchner cayó derrotado, acusó a los intendentes de “traidores” y cuando se le pasó la bronca los convocó a Olivos. Y allí empezó a entender que acaso la “traición” también se alimento de razones demasiado concretar, además del consabido lastre electoral que él encarnaba
“Muchachos: ¿Cómo estamos? ¿Se cumplió lo prometido?”, disparó Kirchner en la primer ronda grande con intendentes. Miradas incómodas, hasta que uno de los presentes se animó: “Bueno…las obras ahí están, avanzan…”.
“No, no me entienden, les llegó lo prometido, la plata”, zanjó brutal Kirchner. “¿Qué plata?”, se animó el jefe comunal de Quilmes, Francisco “Barba” Gutiérrez. “¿Cómo que plata?, la que le dije a Massa que les envíe”, fue la respuesta de un Kirchner cuya cara iba girando al rojo.
Lo que ocurrió luego de esa frase es irreproducible, pero consistió en un largo cruce de insultos, acusaciones y suspicacias varias. Lo concreto: sólo unos pocos elegidos (al parecer por Massa) recibieron los fondos prometidos. Otros nunca se enteraron de su existencia, y algunos firmaron “convenios” por cifras hasta un 200 por ciento menores a las que Kirchner tenía en la cabeza y encima, nunca recibieron los fondos. Obviamente, entre los municipios beneficiados estuvo Tigre.
Se trata de un escándalo que está muy lejos de haberse superado y que sigue enturbiando la relación de Kirchner y Massa. Pero incluso más dañino para las aspiraciones del ex jefe de Gabinete, alimenta una desconfianza visceral de los barones del Conurbano hacia ese joven político, que anuncia a los cuatro vientos sus ganas de pelearle a Daniel Scioli la candidatura a gobernador.

La difícil apuesta de un joven audaz
Tan evidente es el vacío que le hacen sus pares, que al menos en dos ocasiones Massa intentó montar un escenario para mostrarse rodeado de intendentes y fracasó estrepitosamente. La primera fue cuando organizó una “jornada” sobre modelos tributarios a nivel municipal, a la que llevó como estrella al ex recaudador bonaerense Santiago Montoya.
De la decena de intendentes prometidos, apenas pudo mostrar a Pablo Bruera de La Plata; José Eseverri de Olavarría y Juan Pablo de Jesús del Municipio de la Costa. Pareció muy poco como para despuntar una carrera a la gobernación.
Como sea, luego de reponerse de ese tropiezo, el perseverante Massa aprovechó la coyuntura de la pelea del gobierno con los medios y se subió a la visita al país de Al Gore que había organizado el dueño del Grupo UNO, Daniel Vila (ver nota adjunta). Logró que el ex vicepresidente de Estados Unidos accediera a dar una charla en el Tigre, y con esa carta fuerte anunció nuevamente la presencia de sus pares del Conurbano. Movida que terminó cristalizando un nuevo desplante.
Ahora, promete tal como anticipó La Política Online, que la tercera será la vencida y jura que el próximo 24 será masiva la presencia de jefes comunales cuando se concrete un nuevo “foro” de la Fundación Metropolitana que le organiza el ex chachista Pedro del Piero.
Sin embargo, a pesar de sus esfuerzos sus pares del Conurbano no le ven grandes chances: “el escándalo por la plata de los ATN sigue abierto, salvo los dos o tres que van siempre, no creo que Sergio logre sumar a nadie de peso. Por ejemplo, hasta ahora no consiguió ni un mínimo respaldo de alguno de los intendentes pesados de la Tercera y sin eso, cualquier proyecto a gobernador es un chiste”, afirmó a La Política Online un experimentado hombre del Conurbano.
“Si la pelea va a ser Scioli contra De Narváez, Massa se queda sin espacio político”, agregó la fuente. Sin embargo, tampoco habría que subestimar al ex jefe de Gabinete, quien es el primero en entender las limitaciones de su proyecto político, que por ahora, está centrado en mostrarse como una opción. El tiempo dirá si hay que desmontarla o por el contrario, los astros se alinean y termina prosperando. (PUNTO CERO-La Política OnLine).

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