El radicalismo bonaerense está trabajando contra reloj para tratar de evitar la confrontación del 14 de octubre próximo por la conducción partidaria entre el actual oficialismo, compuesto por los seguidores del diputado Ricardo Alfonsín y el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, y la oposición, nucleada en Nuevos Aires. Al parecer, en el propio seno oficialista se habrían producido algunas diferencias.
La interna radical será el 14 de octubre aunque podría evitarse si las dos listas que están presentadas logran ponerse de acuerdo en la distribución de espacios.
La realidad al día de hoy es que la UCR provincial no pudo llevar adelante las elecciones de renovación de autoridades, previstas para el 24 de junio pasado, debido a una resolución emitida 48 horas antes por el titular del Juzgado Federal 1, con competencia electoral, doctor Humberto Blanco, en donde se ordenaba a la conducción partidaria a optimizar los padrones, luego de detectarse seria anomalías.
Asimismo y en esas semanas, la UCR derivó su interna a los bloques legislativos, y el alfonsinismo decidió fracturar la bancada de diputados provinciales, hasta ese momento presidida por Ricardo Jano, para ungir como titular de la misma a Walter Carusso, un possista de la Primera Sección Electoral. De todos modos, lejos de quedar una sola bancada, actualmente funcionan dos bloques radicales: uno presidido por Jano, y el otro por Carusso.
Por estas horas, y con una decena de reuniones celebradas por operadores de ambas facciones, se está tejiendo la posibilidad de una unidad, la que solo se lograría con una distribución de espacios de poder interno de modo equilibrado, aunque de no concretarse esa cuestión, las urnas darán el resultado final a mediados de octubre.
En el oficialismo radical bonaerense hay preocupación por parte de la tropa de Alfonsín por un fuerte avance de Gustavo Posse en el manejo no solo de las negociaciones sino de ocupar los principales casilleros, e incluso en la línea del hijo del ex presidente Raúl Alfonsín, varios “históricos” miran con recelo al diputado Miguel Bazze, presidente saliente del comité radical y principal operador alfonsinista. Algunos “Ricardistas” no se cansan de repetir que “Bazze tiene más compromiso con Posse que con Ricardo, y eso se manifiesta mediante la buena relación que tejió con el senador Roberto Costa (mano derecha del jefe comunal sanisidrense)”.
Las próximas horas serán clave en la interna de la UCR bonaerense, para saber si logran evitar la confrontación o van a encaminados a ella.
Entre la agenda posterior a la normalización de la conducción radical bonaerense está la de tratar de articular una opción política provincial, en donde habrá varias alternativas en el debate: algunos buscarán dialogar con el Frente Amplio Progresista, otros mantenerse como Lista 3 e ir a las elecciones individualmente, e inclusos también hay quienes piensan en un acercamiento al Pro de Mauricio Macri, vía la diputada Gabriela Michetti. (Impulso Baires).
La interna radical será el 14 de octubre aunque podría evitarse si las dos listas que están presentadas logran ponerse de acuerdo en la distribución de espacios.
La realidad al día de hoy es que la UCR provincial no pudo llevar adelante las elecciones de renovación de autoridades, previstas para el 24 de junio pasado, debido a una resolución emitida 48 horas antes por el titular del Juzgado Federal 1, con competencia electoral, doctor Humberto Blanco, en donde se ordenaba a la conducción partidaria a optimizar los padrones, luego de detectarse seria anomalías.
Asimismo y en esas semanas, la UCR derivó su interna a los bloques legislativos, y el alfonsinismo decidió fracturar la bancada de diputados provinciales, hasta ese momento presidida por Ricardo Jano, para ungir como titular de la misma a Walter Carusso, un possista de la Primera Sección Electoral. De todos modos, lejos de quedar una sola bancada, actualmente funcionan dos bloques radicales: uno presidido por Jano, y el otro por Carusso.
Por estas horas, y con una decena de reuniones celebradas por operadores de ambas facciones, se está tejiendo la posibilidad de una unidad, la que solo se lograría con una distribución de espacios de poder interno de modo equilibrado, aunque de no concretarse esa cuestión, las urnas darán el resultado final a mediados de octubre.
En el oficialismo radical bonaerense hay preocupación por parte de la tropa de Alfonsín por un fuerte avance de Gustavo Posse en el manejo no solo de las negociaciones sino de ocupar los principales casilleros, e incluso en la línea del hijo del ex presidente Raúl Alfonsín, varios “históricos” miran con recelo al diputado Miguel Bazze, presidente saliente del comité radical y principal operador alfonsinista. Algunos “Ricardistas” no se cansan de repetir que “Bazze tiene más compromiso con Posse que con Ricardo, y eso se manifiesta mediante la buena relación que tejió con el senador Roberto Costa (mano derecha del jefe comunal sanisidrense)”.
Las próximas horas serán clave en la interna de la UCR bonaerense, para saber si logran evitar la confrontación o van a encaminados a ella.
Entre la agenda posterior a la normalización de la conducción radical bonaerense está la de tratar de articular una opción política provincial, en donde habrá varias alternativas en el debate: algunos buscarán dialogar con el Frente Amplio Progresista, otros mantenerse como Lista 3 e ir a las elecciones individualmente, e inclusos también hay quienes piensan en un acercamiento al Pro de Mauricio Macri, vía la diputada Gabriela Michetti. (Impulso Baires).
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