A pocas horas de haber celebrado unas nuevas elecciones en paz y en plena vigencia del estado de derecho, los radicales de San Miguel nos disponemos a celebrar también los 30 Años de la primera elección democrática que le dio inicio a esta etapa.
Nos resulta muy difícil no asociar aquella recuperación democrática con la figura de Don Raúl Alfonsín.
No porque seamos radicales, ni menos porque queremos apropiarnos partidariamente de los logros conseguidos por la totalidad de la ciudadanía, sino porque entendemos como lo hace la mayoría del pueblo Argentino, que fue aquél hombre el indicado para liderar la muy difícil transición que significó reemplazar la dictadura más sangrienta que había vivido nuestro país por la Democracia.
Aquel gobierno sentó las bases de la etapa más extensa de la vida democrática y que no sólo hoy sigue vigente, sino que se vislumbra la continuidad democrática por los próximos 100 años, como le gustaba vaticinar a Don Raúl.
Aquella convicción Alfonsinista, que significó convertir la recuperación democrática en un estado de derecho permanente 30 años después, se basó en 2 puntos fundamentales:
1. La denuncia del pacto síndico-militar, durante la campaña electoral del año 83, que promovía la auto amnistía de los militares y que los candidatos del Partido Justicialista de aquel entonces prometían convalidar.
2. La creación de la CONADEP y la celebración posterior del juicio a las Juntas militares, que a pesar de las presiones y amenazas varias que le valió a aquel primer presidente de la democracia, puso la valentía sobre la mesa y las mantuvo hasta que se dictó la condena a cadena perpetua a quienes hasta hacía sólo algunos meses eran dueños de la vida y muerte de todos los Argentinos.
La plena recuperación de las instituciones democráticas, de las libertades individuales y de los derechos humanos de aquel gobierno, serán reconocidos por los hombres y mujeres de bien, como las bases fundamentales de esta democracia, que todavía tiene cuentas pendientes, pero que sin lugar a ninguna duda es el único sistema de gobierno que nos permitirá construir una sociedad más justa, más libre y más solidaria.
Aquel 30 de octubre de 1983 Raúl Alfonsín le decía al pueblo argentino: “Hemos ganado, pero no hemos derrotado a nadie... Todos juntos hemos recuperado nuestros derechos... Nunca mas permitiremos que un grupo de iluminados, con o sin uniforme, pretendan erigirse en salvadores de la patria, pretendiendo que obedezcamos sin chistar.”
.....Entre todos vamos a constituir la unión nacional, consolidar la paz interior, afianzar la justicia, proveer a la defensa común, promover el bienestar general y asegurar los beneficios de la libertad para nosotros, para nuestra posteridad y para todos los hombres del mundo que deseen habitar el suelo argentino.
Gracias Don Raúl.....
Raúl Ayesa Cecilia Garrido
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