Así lo sostuvo el titular de la ANSES, en la presentación de un informe de impacto sobre el plan educativo junto al secretario General de la Presidencia, Eduardo de Pedro; al jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, y al ministro Alberto Sileoni. La investigación sostiene que 7 de cada 10 estudiantes ven transformaciones en las aulas gracias a las netbooks. Ya se entregaron más de 4.800.000 equipos en todo el país.
En Casa de Gobierno, el Director Ejecutivo de la ANSES, Diego Bossio, presentó hoy el segundo estudio evaluativo sobre el programa Conectar Igualdad a cinco años de su lanzamiento, llamado Cambios y continuidades en la escuela secundaria: la universidad pública conectando miradas.
Participaron también de la presentación el secretario General de la Presidencia, Eduardo “Wado” de Pedro; el jefe de Gabinete de Ministros de la Nación, Aníbal Fernández; el ministro de Educación, Alberto Sileoni; el secretario de Educación, Jaime Perczyk; la directora ejecutiva de Conectar Igualdad, Silvina Gvirtz; entre otras autoridades nacionales y provinciales.
Al respecto, Bossio destacó: “Conectar Igualdad permitió que las universidades y el Estado tengan una relación más cercana y estrecha. Los docentes valoran que la política haya posibilitado el acceso a una computadora y, gracias a ella, a las fuentes de información. La enseñanza es más dinámica, mejora las comunicaciones entre compañeros y profesores. Conectar Igualdad logró que la escuela pública tenga un lugar valioso en la República Argentina y queremos que sea la primera opción de los alumnos”.
En tanto, Fernández rescató las “posibilidades que permiten las netbooks, como apreciar la información elaborada por otros, escribir, expresarse. Todo lo que encontramos en la web genera cultura y abre puertas a la investigación. En nombre de la Presidenta, transmito nuestro agradecimiento por esta política de estado de cara al futuro”.
La investigación, a cargo de 15 universidades nacionales, se basó en una encuesta realizada a 4900 chicos de 168 escuelas y 2750 entrevistas para directores, docentes, referentes informáticos, alumnos y padres. Y tendrá una tercera etapa que culminará en agosto.
Resultados del estudio
El informe señala que siete de cada diez estudiantes observan transformaciones en la forma de dar clases desde que se incorporaron las computadoras portátiles de Conectar Igualdad a sus aulas. Afirma que “han surgido cambios en las formas de enseñar y de aprender. Este programa favorece la comunicación horizontal, mejora la relación docente-alumno y agiliza el aprendizaje”.
La investigación hace foco en los siguientes ejes: cómo incide el programa en las instituciones, en la práctica docente y en los estudiantes. Sobre el primer punto, se pone hincapié en los nuevos modos comunicacionales entre las instituciones y dentro de la misma escuela, con chats o mails de consultas entre alumnos, docentes y autoridades; se habla de nuevos modos de organizar el tiempo y el espacio. Sobre la práctica profesional, “se advierte una amplia oferta de formación para los docentes”.
Los establecimientos universitarios participantes son de Avellaneda, del centro de la provincia de Buenos Aires, Cuyo, Chaco Austral, Entre Ríos, General Sarmiento, Arturo Jauretche, Jujuy, La Plata, Misiones, Patagonia San Juan Bosco, Río Cuarto, Río Negro, Rosario y Villa María.
Resultados de las encuestas
· 8 de cada 10 chicos usan la netbook en clase, porque tienen agilidad y facilidad en el acceso a la información, ya que cada equipo contiene diversos materiales de estudio.
· Un 43% manifestó que utiliza los recursos extra de las netbooks; aquellos jóvenes de escuelas técnicas son quienes más los aprovechan.
· El 76% valoró la convergencia tecnológica (celulares, cámaras, pendrives) con las netbooks.
· El 84,6% aseguró que la netbook es una buena herramienta para su futuro laboral y formativo.
El programa Conectar Igualdad fue lanzado por la presidenta de la Nación, Cristina Fernández, en abril de 2010, gracias al cual ya se otorgaron 4.810.702 netbooks en 10.874 escuelas, entre secundarias, de educación especial y de formación docente.
Junto con los equipos, las instituciones reciben servidores, pendrives, enrutadores inalámbricos y muebles de guarda. Los dispositivos se entregan en comodato a cada alumno: aquellos que finalizan sus estudios se los quedan.
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